¿Será?

Punto de vista

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La discusión bizantina entre oriente y occidente por demostrar quien tiene el poder, está poniendo a Bolivia al borde de una guerra civil por los intereses de ambos bandos, donde el Presidente Evo Morales apoyados por el occidente indígena boliviano, pretende a través de una ley convocar a elecciones el 2 de julio para escoger la nueva Asamblea Constituyente y proponer que los integrantes de la asamblea sean elegidos en una forma que virtualmente elimina la posibilidad de una representación de la minoría. Esto le daría a Morales un cheque en blanco para convocar nuevas reglas de juego diseñadas a su favor y reemplazar a los recién electos prefectos que hoy constituyen la principal fuerza de oposición.

Por el otro lado Rubén Costas Prefecto del Departamento de Santa Cruz y que ahora se hace llamar, innecesariamente Presidente del Gobierno Departamental de Santa Cruz, pretende hacer respetar las 500 mil firmas que le da derecho al Referéndum Vinculante departamental para administrar sus recursos y llevar a un mejor futuro para los departamentos que deseen autonomías departamentales.

Bolivia está al borde de una guerra civil, todos lo saben, pero nadie se atreve a decirlo para no crear pánico en la población boliviana que se apresta a vivir uno de los choques más importantes luego de la guerra federal entre paceños y chuquisaqueños, cuando los primeros le arrebataron la sede de gobierno a los sucrenses.

Ayer sectores empresariales e instituciones del pueblo junto a la brigada parlamentaria cruceña, se reunieron para dar el apoyo al prefecto Costas, exigiendo que los derechos sean respetados en la línea de las leyes y que el Referéndum Vinculante sea para los nueve departamentos.

Mientras tanto que la Coordinadora de los Pueblos Etnicos de Santa Cruz (CEPSC), a nombre de su líder Manuel Dosapei envuelto en la whipala y asesorado por el MAS, salió al paso de las declaraciones de Costas, advirtiéndole que no representa a todo un departamento y afirmándoles que quieren autonomías sin Referéndum Vinculante, exigiendo no retrasar más la Asamblea Constituyente, contradiciendo y demostrando que Santa Cruz se divide de a poco debilitándolo para la refundación del país.

La guerra civil se viene, o como dice el periodista del Nuevo Herald que "Bolivia esta en camino a una dictadura electa, y pronto dejara de ser una democracia representativa con pesos y contrapesos, y controles sobre el poder central. Ojalá los bolivianos se den cuenta de que el poder absoluto corrompe y empobrece a los pueblos".