Las caras de Bolivia

Sensaciones de un país
Juan Carlos Salinas Cortez
Fueron tres meses donde recorrí parte de Bolivia. Vistie Sucre durante la Constituyente. Me acerque hasta Santa Cruz de la Sierra, y la verdad es un bello lugar y un pueblo digno de conocer, me confundí en las calles de La Paz y estuve esporádicamente por Oruro y Potosí . Fueron 90 días donde los diferentes ritmos de vida de este país se mezclaron con las necesidades económicas y las demandas políticas y sociales.
En Sucre durante agosto la ciudad se transformo en un laboratorio de la bolivianidad. Por donde uno andaba se chocaba con la bandera nacional. Por donde uno iba se codeaba con bolivianos de otros departamentos y con algunos que se habían acercado desde algunos países limítrofes.
La ciudad esperaba a más de 10 mil visitantes anónimos y a no menos de cinco presidentes latinoamericanos, los primeros cumplieron, los segundos estuvieron ausentes. El dia D fue el 6 de agosto esa fecha se iniciaba la era de la Constituyente. Ese día los casi 9 millones de bolivianos se unieron para que la nueva Constitución refunde este país y que los sectores que desde hace más de 182 años de vida republicana estuvieron marginados sean incoroporados plenamente.
Para el mes de septiembre en la ciudad de La Paz los bloqueos de caminos fueron el arma que más utilizaron los distinos sectores que reclamaban mejoras sociales y económicas. Una de esas manifestaciones fue protagonisada por los choferes de esta ciudad que molestos por las nuevas reglas vehiculares decidieron paralizar la Sede de Gobierno y pedir que se habilite la calle Comercio, historicamente peatonal, para el transnporte automotor.
Mientras en el sector andino de este país las protestas se multiplicaban el oriente buscaba desmarcarse de estos reclamos para dar una imagen de un país seguro y seria para las posibles inversiones internacionales.
Son las caras de Bolivia, los distintos rostros de un mismo país que lentamente busca encontrarse y ponerse de acuerdo consigo mismo.